El invierno estaba cada vez más cerca, solo quedaban unas pocas hojas en cada árbol y el suelo era un colchón quebradizo de anaranjado, amarillos y marrones. Kibishī Kaguya estaba fuera de su vivienda, una cabaña en las afueras de la Villa de la Hoja ayudando a Tanku-san con la leña.
- Kibishi, hazme el favor de recoger aquellos troncos y traerlos aquí para cortarlos.
Tanku era ya era veterano, su cabello tenia más tonos grisaseos y blancos que los castaños que hubiera mostrado en otros tiempos. Sin embargo, era un hombre alto, de cuerpo robusto y una cara curtida por el trabajo duro.
Mientras Tanku cortaba leña le gustaba canturrear alguna que otra canción y aquella vez no era la excepción.